Nivel de manejo del médico general: Diagnóstico Específico Tratamiento Inicial Seguimiento Derivar.
Aspectos esenciales
Diagnóstico con Gases Arteriales (PaO2 < 60mmHg y/o PaCO2 ≥ 50 mmHg).
Tratamiento: Oxigenoterapia + optimizar transporte de O2 y ventilación.
Prioridad del tratamiento: Lograr Saturación ≥ 90%
Caso clínico tipo
Paciente de 69 años, EPOC en tratamiento. Ingresa por varios días de tos con escasa expectoración, disnea progresiva sin fiebre. Disneico, FC 110 lpm, FR 32 rpm, normotenso, cianosis, espiración prolongada, sibilancias difusas, disminución difusa del MP, sin crépitos. Hemograma: 13500 blancos, Gases: PO2 50 , PCO2 52, PH 7.412. BE: 6.4 PaO2/FiO2 = 238.
Definición
Incapacidad del aparato respiratorio para mantener los niveles arteriales de O2 y CO2 adecuados para las demandas del metabolismo celular. Por convención con PO2 < 60 mmHg y/o PCO2 ≥ 50 mmHg en GSA. Según su velocidad de instalación y condición basal del aparato respiratorio se clasifican en:
– Aguda (rápida sobre pulmón sano, no permite instalación de mecanismos adaptativos),
– Crónicas (paulatina, bien tolerada) y
– Crónica reagudizada (trastorno agudo que altera la condición crónica del paciente).
Si cursa sólo con hipoxemia se denomina parcial, si cursa con hipercapnia asociada, se denomina global.
Etiología – epidemiología – fisiopatología
Etiología: La IRA puede deberse a una gran variedad de procesos, tanto de localización intrapulmonar como extrapulmonar. Entre las causas más representativas se encuentran la neumonía, el edema agudo de pulmón y el síndrome del distrés respiratorio agudo. La IRC es la consecuencia final de una gran variedad de enfermedades y trastornos respiratorios y no respiratorios (cardíacos, nerviosos, infecciosos, etc.). Sin embargo, la causa de insuficiencia respiratoria crónica más frecuente es la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Fisiopatología: La insuficiencia respiratoria (I.R) puede deberse a:
a) Una disminución en la presión de oxígeno en el aire inspirado,
b) Una hipoventilación alveolar,
c) Una alteración en la capacidad de difusión alvéolo-capilar,
d) Un desequilibrio en la relación entre la ventilación y la perfusión pulmonares (el mecanismo más frecuente) y
e) La existencia de un cortocircuito de derecha a izquierda.
Pudiendo corresponder a una falla del pulmón como órgano intercambiador de gases o a una deficiencia de la bomba ventilatoria.
Diagnóstico
Sospecha clínica confirmada por: Gasometría Arterial.
a) Clínica: Disnea, Taquipnea de instalación brusca y mal tolerada (por cuadro agudo o reagudizado), Taquicardia, Cianosis (aparece con PO2 < 50 mmHg), Arritmias, Alteraciones de conciencia, coma.
Manifestaciones de: Hipoxia: taquicardia, hipo-hipertensión, ángor, cianosis, ansiedad, convulsiones. Hipercapnia: hipotensión, vasodilatación, edema, cefalea, edema papilar, asterixis, etc.
b) Gases arteriales: PCO2 ≥ 50 mmHg (I.R Hipercápnica); PO2 < 60 mmHg (I.R Hipoxémica), cuando ambas coexisten I.R Global.
Tratamiento
La clave del tratamiento de la I.R es la resolución de la enfermedad subyacente que la desencadenó.
Medidas:
a) Corrección de la hipoxemia con oxigenoterapia con PO2 < 60 mmHg o PaFi < 300, incrementar la saturación cercana al 90% (para pacientes crónicos retenedores de CO2) o > a 91% (pacientes previamente sanos) es la mayor prioridad en el manejo.
b) Reducción de los requerimientos de oxígeno: Tratar la fiebre, agitación, sepsis, respiración dificultosa conlleva marcada disminución del consumo de oxígeno.
c) Optimizar transporte de Oxígeno normalizando el gasto cardíaco y glóbulos rojos.
Seguimiento
Por especialista.