Diagnóstico diferencial de hipoacusias sensorioneurales

Diagnóstico Sospecha Tratamiento Inicial Seguimiento Derivar

Aspectos esenciales

  • La hipoacusia sensorioneural es el déficit sensorial más frecuente de la población general.
  • La presbiacusia es patología GES. Se caracteriza por ser bilateral, simétrica y progresiva.
  • La enfermedad de Meniere presenta la tríada sintomática de hipoacusia, tinnitus y crisis vertiginosas.

Caso clínico tipo

Paciente masculino 70 año, HTA. Consulta por dificultad al escuchar. Presenta otoscopia normal. Su conducta sería:

a) Decirle que es normal por su edad y control SOS.

b) Decirle que es normal a su edad y derivar a ORL.

c) Solicitar TAC de cerebro.

d) Descartar cuadro respiratorio alto, dar AINES y controlar en 15 días.

e) Solicitar audiometría e impedanciometría y controlar.

R: b

Definición

La hipoacusia sensorioneural es la incapacidad de oír normalmente a causa de defectos en el oido interno, la cóclea o el nervio auditivo.

Etiología-epidemiología-fisiopatología

La hipoacusia es el déficit sensorial más frecuente de la población general. La hipoacusia sensorio neural tiene múltiples causas, entre las que se encuentran:

PresbiacusiaOtotóxicosEnf. MeniereLaberintitisSúbita
Neurinoma del acústicoTrauma acústicoTraumatismoBarotraumaAutoinmune

La pérdida de la audición aumenta su prevalencia con la edad. Desde un 11% entre los 44 y 54 años llegando a la mitad de la población de 75 años. Esto principalmente a causa de la presbiacusia, una patología multifactorial caracterizada por hipoacusia bilateral simétrica y progresiva. Dentro de los factores de riesgo se encuentran: Exposición a ruidos, ototóxicos, bajo NSE, hipertensión, diabetes, tabaquismo, enfermedad vascular, trastornos inmunológicos y factores hormonales.

Según la Guía GES 2010 de Hipoacusia Neurosensorial en el Prematuro, se estima que aproximadamente 1-2 de cada 1000 nacidos vivos estaría afectado con hipoacusia congénita bilateral severa a profunda lo que se extrapolaría a 250 a 500 recién nacidos afectados con Hipoacusia bilateral congénita.

Diagnóstico

Se realiza con anamnesis, el paciente refiere hipoacusia, más la exploración física que incluye las pruebas de Weber y Rinne, y la otoscopia. Las pruebas de Rinne y Weber permiten distinguir si la hipoacusia es de transmisión o sensorioneural. El diagnóstico se complementa mediante la audiometría. Otros exámenes que pueden realizarse son: impedanciometría, potenciales auditivos de tronco encefálico y emisiones otoacústicas.

Dependiendo de la causa de la hipoacusia serán los hallazgos en la anamnesis y los exámenes:

1.- Presbiacusia: Se trata de una hipoacusia producida por la edad; normalmente alrededor de los 50 años se empieza a producir una pérdida progresiva de la audición. Primero se manifiesta a través de una pérdida leve para los tonos agudos, para luego ir avanzando en intensidad y comprometiendo secundariamente a los tonos medios y graves. Se caracteriza por ser bilateral, simétrica y progresiva y suele acompañarse de tinnitus.

2.- Exposición a Ruido o Trauma Acústico: El oído es incapaz de resistir un trauma acústico intenso o exposiciones continuadas a ruido de intensidad elevada, sin que ello implique una lesión orgánica a nivel del órgano de Corti, que se traduce en hipoacusia y tinnitus. El trauma acústico se puede clasificar en agudo y crónico, según el tiempo de exposición al ruido.

a) Agudo:exposición a un ruido intenso de corta duración. Puede ser uni o bilateral, y si es de gran intensidad, puede llevar a la rotura de la membrana timpánica y, en ocasiones a rotura de la membrana laberíntica, con fístula peri y/o endolinfática.

b) Crónico: La exposición a ruido crónico lleva a un deterioro permanente del umbral auditivo. La hipoacusia es casi siempre simétrica. Se considera nocivo un ruido continuo de 85 dB en una jornada de 8 horas.

3.- Enfermedad de Meniere: Es una enfermedad del laberinto membranoso, de etiología desconocida, en la cual histopatológicamente se encuentra un hidrops endolinfático. Clínicamente se caracteriza por la tríada sintomática de hipoacusia, tinnitus y crisis vertiginosas recurrenciales. La hipoacusia generalmente es unilateral y habitualmente es “fluctuante”, se suele acompañar de sensación de “oído tapado”, algiacusia (sensación de desagrado frente a ruidos intensos) y diplacusia (distorsión auditiva en el oído afectado). El tinnitus generalmente es unilateral y fluctuante. Las crisis vertiginosas generalmente son espontáneas de duración variable ( minutos a horas) y generalmente se acompañan de manifestaciones neurovegetativas.

4.- Laberintitis: El compromiso bacteriano del laberinto ocurre habitualmente por vecindad. Se clasifican en: laberintitis aguda tóxica (irritación del laberinto por infección meníngea u ótica sin invasión en oído interno), laberintitis aguda supurada (existe invasión microbiana del oído interno) y laberintitis crónica (en contexto de OMC).

5.- Hipoacusia Súbita.

6.- Neurinoma del Acústico: Es un tumor benigno, de crecimiento lento, que se forma a expensas de las células de Schwann de la vaina del nervio vestibular. El primer nervio comprometido es el coclear, por lo que el tinnitus unilateral es el primer síntoma, con hipoacusia unilateral leve, hasta déficit neurológico de múltiples nervios craneanos y signos cerebelosos si hay invasión extensa.

7.- Ototóxicos: Existen varias drogas que pueden producir hipoacusia. Algunos producen una lesión irreversible, como los aminoglicósidos y los anticancerosos (especialmente los alquilantes). Otros originan un daño reversible, como la furosemida y el ácido acetilsalicílico.

8.- Traumatismos: Pueden ir desde la conmoción laberíntica, hasta la fractura de peñasco.

9.- Barotrauma: Esta patología es frecuente en buzos. Los cambios de presión bruscos pueden llevar a una destrucción de las membranas del oído interno, dando lugar a una hipoacusia sensorioneural y/o vértigo.

10.- Hipoacusia Autoinmune: Se suele presentar como una hipoacusia sensorioneural progresiva en semanas o meses, generalmente bilateral y simétrica, que suele llegar a sorderas profundas.

Tratamiento

El tratamiento va a depender de la causa de la hipoacusia. Todas requieren tratamiento por especialista.

Seguimiento

El seguimiento es por especialista.

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