Audiometría Básica.

1.- Definición:

La Audiometría es la prueba de audición más usada. Corresponde a un examen subjetivo (requiere colaboración del paciente) que tiene por objeto cifrar las alteraciones de la audición en relación con los estímulos acústicos, resultados que se anotan en un gráfico denominado audiograma. Esto se obtiene dando estímulos sonoros de distinta frecuencia (Hz) a distinta intensidad (dB) recorriendo el espectro tonal, frente a los cuales el paciente responde si escucha o no. Por esta razón, es difícil realizarla en menores de 3 años o en pacientes discapacitados.

2.- Forma de realización:

Se utiliza un aparato electrónico generador de tonos puros llamado audiómetro. Cada tono puede ser generado a una intensidad que va desde 0 dB hasta 110 dB. Se debe recalcar que cero dB no significa ausencia de sonido, sino que es una medida promediada y significa el menor estímulo que en determinada frecuencia un oído normal debería escuchar.

El audiómetro convencional entrega tonos puros desde los 125 Hz hasta los 8000 Hz, que son la frecuencias más usadas por el oído humano. La transmisión sonora por la vía aérea se realiza a través del aire colocando unos auriculares en el pabellón de la oreja y la estimulación sonora por la vía ósea se realiza colocando un vibrador en la apófisis mastoides. El umbral auditivo corresponde a la menor intensidad de sonido que se debe aplicar para ser escuchado el 50% de las veces en una determinada frecuencia. Lo normal es que esa intensidad fluctúe entre 0 y 20 dB.

La vía ósea es difícil de interpretar por la transmisión ósea transcraneana, al comportarse todo el cráneo como una sola pieza de transmisión de la vibración, por lo que resulta frecuentemente indispensable ensordecer el oído opuesto, técnica que en audiometría se denomina enmascaramiento.

Se enmascara en los siguientes casos:

  1. Siempre que la conducción ósea de un oído sea como mínimo 40 dB mayor que la conducción aérea del oído contrario.
  2. Cuando la diferencia entre las exploraciones de las dos vías óseas sea de 15 dB o más.
  3. Cuando la diferencia entre vías aéreas sea de 40 dB o más.
  4. Cuando exista evidencia de lateralización, prescindiendo de las diferencias entre vías.

3.- Indicaciones:

Su principal propósito es determinar el tipo, grado y configuración de las hipoacusias.

  1. Determinar umbral auditivo mínimo: cuánto está escuchando el paciente.
  2. Establecer Topodiagnóstico: saber si hay una hipoacusia de conducción o sensorioneural.
  3. Estudiar labilidad al trauma acústico.
  4. Detección de Simuladores y Disimuladores: simuladora es la persona que inventa que tiene una sordera, mientras que disimuladora es la persona que tiene una sordera, pero la exagera; esto tiene implicancias médico legales.
  5. Acufenometría o Tinnitumetría.
  6. Determinar grado de invalidez auditiva médico-legal.
  7. Pronosticar tratamiento quirúrgico: esto según la magnitud de la pérdida de la audición.
  8. Exploración de restos auditivos en sordos.
  9. Prescripción de órtesis y prótesis auditivas: relacionado con el uso de audífonos (GES: Hipoacusia bilateral en personas de 65 años y más que requieren uso de audífonos)

4.- Contraindicaciones:

Relativas: pacientes que no puedan colaborar con la realización del examen, ya sea por edad (niños menores de 3 años) o por otras condiciones (compromiso de conciencia, por ejemplo).

5.- Informe de especialista:

El resultado de la audiometría se anota en un gráfico en que la horizontal corresponde a las frecuencias medidas en Hz y la vertical a la intensidad de sonido entregado en dB. La determinación para cada oído se anota con un color y un símbolo, siendo para el oído derecho el color rojo y el signo (<) para la vía ósea y el círculo para la vía aérea (o). El oído izquierdo se anota en color azul, con el signo (>) la vía ósea y con una (x) la aérea. Los puntos del gráfico se unen con una línea discontinua en el caso de la vía aérea y con una línea continua para la vía ósea, de esta forma, queda dibujada la curva de audiometría. Se tienen ciertos símbolos especiales para el enmascaramiento.

6.- Interpretación del examen:

En la audiometría existen cuatro posibilidades de resultado para cada oído:

  1. Vía aérea y vía ósea superpuestas (iguales) en un rango entre 0 y 20 dB. Este resultado corresponde a un examen normal.
  2. 2.Vía aérea y vía ósea superpuestas, pero bajo el rango normal, es decir, entre 20 y 110 dB. Este resultado implica una lesión a nivel de oído interno y se denomina hipoacusia sensorioneural.
  3. Vía ósea normal y vía aérea bajo lo normal. En este caso las curvas se verán separadas, por lo que se denomina diferencia o gap ósteo-aéreo. Este resultado implica una falla de la transmisión del sonido al oído interno y se da característicamente en las lesiones del oído externo y medio. Se denomina hipoacusia de conducción.
  4. Vía ósea bajo lo normal, con vía aérea también bajo lo normal pero peor que la ósea, separadas por al menos 10 dB. Esto se denomina hipoacusia mixta e implica una lesión en el oído externo o medio más una hipoacusia sensorioneural ipsilateral.

Además de la investigación de los umbrales auditivos, el audiómetro se utiliza para realizar otras pruebas que se llaman supraliminares, que sirven para diferenciar sorderas de tipo sensoriales de aquellas neurales. Dentro de estas pruebas, la que se realiza con más frecuencia es la de discriminación auditiva, en que se le dicta al paciente una lista de palabras y se ve qué porcentaje de ellas es capaz de entender.

7.- Signos de alarma:

Ante alteraciones en la audiometría, y habiéndose descartado patologías de manejo de medicina general (tapones de cerumen, otitis externa y media, etc.), se debe realizar derivación a otorrinolaringología para estudio y manejo.

Si el promedio tonal puro (PTP), es decir, la audición promedio de las frecuencias 500 a 4000 hz es mayor de 40 dB bilateral, está indicado el uso de audífonos. También se indica uso de audífonos en pacientes con hipoacusia entre 35 y 40 dB en el mejor oído con repercusión social. El GES financia un audífono en pacientes de 65 años y más con hipoacusia que lo requiera.

8.- Riesgos:

No existen riesgos para su realización.

9.- Bibliografía:

  1. MINSAL. Hipoacusia bilateral en personas de 65 años y más que requieren uso de audífono. Serie Guías Clínicas MINSAL, 2013.
  2. 2.Marcos Goycoolea V., Josefina Ernst V., Viviana Orellana P., Pamela Torres U. Métodos de Evaluación Auditiva. Revista Médica Clínica Las Condes Vol. 14 N°1. Enero 2003.
  3. 3.Walter J. Audiology Pure-Tone Testing. Medscape. Updated: Apr 07, 2016.
  4. 4.http://escuela.med.puc.cl/paginas/publicaciones/apuntesotorrino/audiometria.html
  5. 5.http://escuela.med.puc.cl/paginas/publicaciones/otorrino/otorrino_a011.html
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