Nivel de manejo del médico general: Realizar

Introducción

La Evaluación Nutricional Subjetiva es una de las herramientas clínicas que existen para evaluar el riesgo de desnutrición en los pacientes, caracterizada por ser reproducible, correlacionarse con otras mediciones nutricionales y ser factor pronóstico. Sirve para detectar si existe algún problema nutricional, ver la magnitud y características de éste y con ello plantear pautas para corregir los problemas encontrados.

La importancia de este procedimiento radica en que la desnutrición es una complicación frecuente en pacientes hospitalizados, con una prevalencia que oscila entre el 30% al 50-60% (pacientes geriátricos y oncológicos) y que incluso puede ser mayor en pacientes de mayor gravedad debido a las alteraciones metabólicas y al déficit de nutrientes al que se exponen; además la desnutrición complica los cuadros de pacientes hospitalizados dado que se asocia a hipofunción respiratoria, inmune, muscular, alteraciones de la cicatrización y deterioro de la calidad de vida, lo cual en conjunto trae como consecuencia una mayor morbi-mortalidad  del paciente.

Diversos estudios han mostrado la utilidad de la EGS teniendo como resultado la inclusión de esta en la evaluación nutricional de pacientes con ERC y siendo usada como herramienta para predecir el pronóstico del paciente en UCI y en general predictor de egresos hospitalarios desfavorables.  
La Evaluación Nutricional Subjetiva comprende anamnesis, examen físico y evaluación subjetiva.

Indicaciones

  • Pacientes hospitalizados por enfermedad grave o crónica, con riesgo de desnutrición asociado.

Contraindicaciones

  • No tiene.

Materiales o insumos necesarios

  • Caliper
  • Balanza
  • Calculadora

Preparación

  1. Anamnesis
    1. Peso: preguntar al paciente por el peso habitual, el peso perdido en los últimos 6 meses y solicitar al paciente indique como el peso se ha comportado las últimas 2 semanas.
    2. Ingesta alimentaria: determinar si existe cambio en la dieta y porqué.
    3. Síntomas GI: consignar síntomas, siendo solo significativos si han estado presentes la mayoría de los días (diarrea o emesis intermitente no se consideran).
    4. Capacidad Funcional: consignar si hay disfunción.
  2. Diagnóstico principal y su relación con las necesidades nutricionales: Considerar nivel de estrés (leve-moderado.severo) en el paciente considerando el tipo de patología que padece

Procedimiento

  1. Examen Físico
    1. Pérdida grasa subcutánea: medir pliegue tricipital y línea axilar media-reborde costal (> 1cm normal, < 5mm anormal).
    2. Pérdida muscular: Observación y palpación de deltoides y cuádriceps, medir tono muscular.
    3. Edema: presencia de edema Pretibial, Sacro y/o Ascitis.
  2. Evaluación subjetiva

Diagnóstico subjetivo en relación a 4 parámetros: peso (kg), ingesta deficiente. pérdida de tejido subcutáneo y pérdida de tejido muscular.
Indicadores sugerentes de A: Peso normal (sin pérdida), sin pérdida de tejido muscular o subcutáneo, ingesta adecuada.

  • Indicadores sugerentes de B: Disminución 5% peso en las últimas semanas sin estabilización, disminución de la ingesta y leve disminución de tejido subcutáneo y muscular.

Indicadores sugerentes C: Disminución significativa del peso (mayor a 10%), disminución importante de tejido muscular o subcutáneo.

Complicaciones

No tiene

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